Lima, Perú. – En una propuesta ingresada el 19 de junio de 2025 por la congresista Katy Ugarte Mamani, ha presentado una propuesta legislativa que permitiría, que los afiliados a EsSalud aseguren a sus padres en situación de dependencia económica. Sin embargo, ¿está EsSalud preparado para asumir más asegurados cuando ya arrastra una deuda superior a los S/240 millones y enfrenta escasez de insumos médicos?
Proyecto de Ley 11697/2024-CR – Asegurar a padres con dependencia
El proyecto propone modificar la Ley de Modernización de la Seguridad Social en Salud para permitir que los afiliados de EsSalud incorporen a sus padres como derechohabientes, siempre que estos se encuentren en situación de dependencia económica.
Con este fin, la iniciativa contempla dos escenarios:
- Padres o madres mayores de 60 años sin ingresos, pensión o apoyo familiar suficiente.
- Padres menores de 60 años con incapacidad física o mental que les impide trabajar y que además dependen económicamente del afiliado.
Se define dependencia económica como la falta de recursos propios, pensiones insuficientes, y ausencia de otros familiares que puedan prestar asistencia.
La propuesta busca aliviar la carga económica de miles de familias que actualmente asumen todos los costos de salud de sus padres, al margen de su propio aporte mensual al seguro social. También se plantea como un mecanismo para descongestionar el Seguro Integral de Salud (SIS), al trasladar parte de esa demanda al sistema contributivo.
¿Cuántas personas podrían incorporarse?
Aunque el Congreso no ha dicho cuántas personas se verían afectadas si esta ley se aprueba, mirando las cifras públicas podemos hacernos una idea. Actualmente, el SIS atiende a más de 2.6 millones de personas adultas mayores en todo el país, y muchas de ellas dependen económicamente de sus hijos o familiares.
Si solo una parte de ese grupo —digamos un 10%— pasara a EsSalud, eso significaría sumar entre 100 mil y 300 mil personas nuevas al sistema, personas que, por su edad o condición, necesitan atención médica frecuente, medicamentos constantes y, muchas veces, hospitalización.
¿En qué condiciones se encuentra EsSalud?
Actualmente, EsSalud enfrenta una deuda acumulada de más de S/240 millones con proveedores de insumos médicos, lo que ha provocado: suspensión de cirugías programadas, desabastecimiento de medicinas, reprogramación de tratamientos crónicos y denuncias de hospitales sin materiales quirúrgicos.
Especialistas en salud pública han expresado su preocupación sobre los posibles efectos negativos de esta ampliación sin respaldo logístico ni presupuestal. “No se puede ampliar la cobertura de forma responsable si antes no se garantiza la calidad del servicio existente. Es como construir un tercer piso sin reforzar los cimientos”, alerta Mariana Tello, economista en temas de salud.
Además, la Comisión de Salud del Congreso aún no ha iniciado debate formal sobre la iniciativa. Mientras tanto, la Contraloría y los entes fiscalizadores observan cómo se siguen acumulando deudas, postergando cirugías y generando más presión sobre un sistema que ya está al límite.
¿Cuál es la solución?
El espíritu del proyecto es comprensible, el derecho a cuidar a quienes nos cuidaron. Sin embargo, en un contexto donde EsSalud no puede pagar a sus proveedores, ni garantizar insumos esenciales, ni sostener el ritmo de atención, la propuesta podría convertirse en una bomba de tiempo.
Antes de aprobar esta medida, es necesario:
- Exigir estudios de impacto realistas, y
- Garantizar fondos adicionales y sostenibles
Es importante que esta propuesta no se convierta en una excusa para descuidar al SIS, que sigue siendo el único respaldo para millones de peruanos sin capacidad de aportar.
Trasladar a los adultos mayores a EsSalud no puede significar darles la espalda, especialmente cuando el propio EsSalud enfrenta una grave deuda y limitaciones para atender a sus asegurados. Ningún adulto mayor debería quedar atrapado entre dos sistemas frágiles y sin respuestas.
